Como todos los
segundos lunes de cada mes y siguiendo con su Ciclo de Educación
Permanente, el pasado 12 de abril la Fundación Liga del
Consorcista de la Propiedad Horizontal, abordó el tema: Encargados
de Edificios en la Sede del Defensor Del Pueblo De La Nación
Argentina. En esta oportunidad, fueron invitados los Dres. Diana
Sevitz y Daniel Elizondo, éste último co-fundador de la Fundación
AIPH (Administradores Independientes de Propiedad Horizontal).
Inició el
acto el Dr. Osvaldo Losi, presidente de la fundación organizadora,
quien recordó que la función de estos encuentros es reflexionar con
especialistas acerca de temas que hacen a la convivencia urbana.
Señaló que
el encargado del edificio –tema puntual de esa reunión- viene a ser un
personaje que cumple un papel muy especial en un consorcio y, a modo de
pivote, el único vecino que de una forma u otra tiene una relación
diaria con la gente. En algunos casos hay copropietarios que durante años
no se conocen entre sí ni se saludan pero no pueden ignorar al encargado.
El encargado puede, de ese modo, evitar conflictos pero también crearlos
o exacerbarlos. Puede ser vehículo de entendimiento como también gestor
de desavenencias. Destacó que hay "lazos morales naturales en los
consorcios, que ligan a las personas decentes como, por ejemplo, el deber
de asistencia recíproca en caso de algún siniestro".
Puntualizó
que conforme a la ley 13.512 el administrador puede contratar al
encargado, despedirlo y sancionarlo sin pedir autorización a la Asamblea,
lo cual suele originar abusos en ciertas malas administraciones, por lo
que considera que es un punto que una futura reforma de la ley debería
contemplar.
Según
expresó, en la actualidad los encargados de edificios gozan de iguales o
superiores derechos que el trabajador común, lo cual genera situaciones
irritantes cuando en el consorcio hay propietarios desempleados o
jubilados. También opinó que es injusto que estas personas con sus
magros salarios y en estado de necesidad deban contribuir a la
financiación de la entidad gremial de los encargados. Se preguntó el
disertante si ello es justo. ¿Puede ser considerado el conjunto de
propietarios del mismo modo como cualquier empresa? Evidentemente no...
Es por ello
que se hace necesario, para determinar el papel que el Encargado juega
dentro del Consorcio, adoptar una posición, un criterio respecto del
Consorcio en sí mismo. ¿Qué es lo que diferencia a un Consorcio de
cualquier empresa? Sin duda el afán de lucro. En un Consorcio no existe
la ganancia como motor de la convivencia. En la Propiedad Horizontal, la
gente sólo quiere vivir o trabajar en paz.
Cabe destacar
que los legisladores no debieran ser ajenos al problema porque ya han
hecho esa distinción en otras ocasiones. Por ejemplo, cuando han debido
legislar sobre el personal que se desempeña como servicio doméstico en
las casas de familia. Teniendo en cuenta la naturaleza del empleador, en
el sentido de que no se trata de una empresa, de que no hay lucro, bueno,
le han otorgado a los trabajadores en ese caso una categoría especial
acorde con el sentido común. Esto también debiera ser contemplado en una
futura reforma del sistema.
A
continuación habló la Dra. Rita Sessa, cultora del Derecho
Laboral, quien analizó puntos de la ley 12981 (Estatuto del Encargado)
y del Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) resolución 306/98
(BO 20-10-98). La disertante enfatizó la necesidad de cultivar el buen
trato con el trabajador porque el encargado es finalmente un vecino más.
Parafraseando al poeta, concluyó que "si plantamos rosales
obtendremos rosas".
Se explayó
luego la Dra. Diana Sevitz, mediadora y árbitro en Propiedad Horizontal,
quien consideró al encargado como a una persona con clara función de
servicio, sin la cual sería muy difícil la vida cotidiana en un
consorcio. Se refirió a aspectos prácticos de la ley 12981 y citó
abundante y valiosa jurisprudencia.
Finalmente
habló el Dr. Daniel Elizondo en su carácter de administrador de
consorcios e integrante de la Fundación AIPH, entidad con la que la
Fundación Liga del Consorcista de la Propiedad Horizontal ha encontrado
muchos puntos de contacto sobre todo en cuanto a principios éticos, a la
necesidad de jerarquizar académicamente la función de administrar y a
métodos de transparencia administrativa. El mismo habló sobre
situaciones que se le han presentado cotidianamente en su relación con
los encargados y entre éstos y algunos consorcistas. Enfatizó finalmente
que él personalmente siempre al tratar con el personal de los edificios
"plantó rosales" pero muchas veces, lamentablemente, se
lastimó con las espinas