[BPN-10/03/10]
El Consejo de Administración de la OIT (Organización
Internacional del Trabajo) declaró que "la queja presentada por
la Federación Argentina de Consorcios (FAC) por
comunicaciones de 27 de diciembre de 2007, 14 de febrero y 15 de julio de
2008 no era admisible". Esto surgió del 355º Informe del Comité de
Libertad Sindical, publicado en Ginebra, en noviembre de 2009 y detallado
en el punto 10 bajo el título "Admisibilidad de una queja".
En una
entrevista concedida a Pequeñas Noticias, el presidente de la FAC,
Marcos Bergenfeld, confirmó la respuesta de la OIT y agregó que
"nosotros con todo el derecho que nos da la legislación nacional,
estamos actuando en contra de eso. Ya enviamos una carta, fechada el
10/02/2010 donde pedimos la reconsideración [del fallo]". "Las
puertas de la OIT no están cerradas porque quien está manejando el tema
es el Dr. Marcelo Castro Fox, por delegación del Director General
[de la OIT, el chileno Juan Somavia]", declaró Bergenfeld.
El presidente
de la FAC, en el programa Hablemos de Consorcios del viernes 5,
aclaró que "quienes pagan el sueldo a los empleados del consorcio
son los consorcistas y los administradores no tienen ningún derecho de
estar presentes en paritarias" y agregó que en eso radicó el pedido
ante la OIT.
El presidente
de la FAC también aseguró que al pedido de reconsideración aún no han
recibido respuesta de la OIT porque "el Comité Central se reúne
cada seis meses".
Sí, en
cambio, el 7/12/09 les llegó una respuesta a la solicitud de información
sobre los fundamentos de la negativa de la OIT que Bergenfeld envió el
19/11/09. En ella la directora adjunta del Departamento de Normas
Laborales le informó que "sobre los fundamentos que llevaron al
Comité de Libertad Sindical del Consejo de Administración de la OIT a
decidir que la queja presentada por su organización fue declarada
inadmisible, se le informa que las deliberaciones de este órgano se
realizan a puertas cerradas y son confidenciales".
Por su parte Alicia
Giménez, vicepresidenta de la FAC, comentó que "cuando
hicimos la presentación jamás nos dijeron que, en el caso de la no
admisibilidad, no íbamos a saber el porqué ni los argumentos de esa
decisión".
Por último,
Bergenfeld opinó que la OIT no analizó "bien el tema y estamos
dispuestos a agregar más elementos de juicio con respecto a esto. La
vamos a seguir peleando porque estamos representando a gente que tiene un
derecho". También añadió que "en el caso de que se desestime
completamente este pedido en la OIT, nos queda la Corte Internacional de
La Haya y los tribunales de la OEA".