El pasado
jueves 11 de noviembre de 2004, alrededor de 300 sindicalistas se
reunieron en el Comité Central Confederal y consensuaron un documento
donde en sus últimas líneas trata de presionar al gobierno.
De allí surgió la
declaración que si no obtienen una respuesta a sus reclamos salariales no
dejarán de tomar "medidas de acción directa" aunque trataron de
evitar la palabra "paro y movilizaciones" y aunque no dejaron de
elogiar los esfuerzos del gobierno nacional por terminar con las
desigualdades y el tratamiento de la deuda externa.
La CGT sigue
su camino en busca de un aumento en los importes de las asignaciones
familiares y en los haberes, basándose en el compromiso que el gobierno
"asumió de elevar los salarios de los trabajadores activos,
jubilados y pensionados para salir de la indigencia, la pobreza y la
marginalidad" y están convencidos que tendrán novedades
favorables antes de fin de año con respecto a las asignaciones mientras
que es posible una espera más larga para el tema de los salarios.
Actualmente
los salarios básicos vigentes del sector de la propiedad horizontal
surgen del Convenio Colectivo de Trabajo Nº 378/04, publicado en el
Boletín Oficial (BO) del día 7 de mayo de 2004 y la última vez que el
valor de las asignaciones familiares aumentaron fue en enero de 2003
cuando el Decreto 1819/2002 restituyó el 13% que se le habían quitado al
valor de las asignaciones familiares. Después, el 1º de abril de 2004 se
publicó en el BO el decreto 368/04 por el cual se estableció un aumento
en los topes salariales lo que estableció que si el sueldo bruto mensual
del trabajador (sin horas extras) estaba entre $100 y $724 la asignación
por hijo era de $40; si se ubicaba entre $725 y $1224 era de $30; si lo
estaba
entre $1225 y $1724 era de $20 y si superaba los $1724 no se abonaba, salvo se
tratara de un hijo discapacitado. La Ayuda Escolar Anual se paga en todos
los caso y es de $130 por hijo. El valor de la asignación familiar por
hijo discapacitado es 4 veces la del hijo.
La idea de la
CGT es aumentar el importe de las asignaciones y al mismo tiempo
unificarlo, evitando así los topes salariales.