Los ricos al cielo, los pobres debajo

[BPN-11/09/13] En Nueva York (Estados Unidos), una empresa de desarrollo inmobiliario está construyendo una torre de lujo que tendría dos puertas de ingreso: una para los inquilinos "de lujo" y otra para los inquilinos de "clase media".

Según informó el diario estadounidense New York Post, en esa ciudad rige una norma que establece beneficios impositivos para aquellos desarrolladores inmobiliarios que destinen parte de  edificios lujosos a personas de menores recursos económicos.

Con el objetivo de beneficiarse con esta norma y eximirse de pagar ciertos impuestos, la empresa constructora Extell construirá una torre de 33 pisos que dividió en dos sectores: el primero desde el piso segundo hasta el sexto (55 unidades) para alquilar desde unos 850 dólares a personas de clase media y el segundo desde el séptimo hasta el 33º (219 unidades) para clientes que puedan comprar departamentos de un valor que arranca en el millón de dólares.

En sintonía con esta división de poder adquisitivo, la constructora proyectó dos puertas diferenciadas de ingreso al edificio: una por la calle Riverside Boulevard -una de las más importantes de Nueva York- para acceder a los lujosos departamentos de los niveles superiores cuya vista da al río Hudson y otra más modesta en una calle lateral para ingresar a las viviendas de los primeros pisos.

Luego de que se conoció la noticia surgieron las repercusiones públicas. Una asambleista local, Linda Rosenthal, consideró que esta decisión "huele a clasismo" y agregó: "es un flagrante intento de segregar a la gente", publicó el New York Post.