: El
exfuncionario del Registro Público de Administradores
bonaerense calificó a Pequeñas Noticias y a Ud. como pulgas
y pulgosos, ¿una primera impresión?
Claudio
García de Rivas: Totalmente conforme. Le agradezco a Hernández
porque tiene una aguda percepción de la realidad y supo plasmarla
en una sola palabra. Bueno no lo pudo hacer con una, necesitó dos.
PN:
No entiendo, ¿por qué lo evalúa así?
CGdR:
Es muy fácil, cuando se califica a otro de pulga, en general se
hace comparándolo con uno mismo o con los de la propia clase. O sea
que a Pequeñas Noticias y yo mismo –si me mencionó
directamente- nos consideró unas pulgas –o unos pulgosos- pero,
¿con respecto a quién? A él mismo. Entonces quiere decir que él se
ve a sí mismo como grande, poderoso e importante y a nosotros como
pulgas. Y tiene razón.
Él
-pagado por los contribuyentes bonaerenses- vive en el nivel de vida
de un alto funcionario del Banco Provincia, es un importante
profesional del derecho y tuvo el máximo cargo en el Registro
Público de Administradores que depende del Poder Judicial. Es un
grande.
Compárelo
con el nivel de vida de la mayoría de los bonaerenses que con sus
impuestos pagan su sueldo: Hernández gana bien, come bien, sus
hijos deben ir a buenos colegios, tiene una hermosa casa, tiene
cobertura médica de calidad, no se pierde de ningún partido en la
cancha. Ahora piense en los jubilados bonaerenses, en los obreros,
en los empleados de comercio, ¿se entiende el punto?
No
es raro que se sienta grande y poderoso con respecto a aquellos a
los que siente que son pulgas o pulgosos a su lado.
PN:
¿Pero Ud. se siente una pulga?
CGdeR:
Por supuesto. El medio que yo dirijo y yo mismo nos identificamos
como parte de ese pueblo al que le cuesta pagar las expensas, que
tiene que hacer mil cuentas antes de darse un gusto, que debe
trabajar hasta que lo sorprenda la muerte porque si no con la
jubilación no alcanza. Uds. viven en la Argentina, ¿tengo que
seguir detallando diferencia de estilo de vida de funcionarios y
políticos con el pueblo...?
En
otros siglos Hernández hubiera sido parte de esa aristocracia
educada y poderosa que llenó con sus nombres los libros de historia
mientras que Pequeñas Noticias y yo hubiéramos sido parte
de una plebe rebelde, contestataria y apegada a principios a los que
esa aristocracia –con justa razón- nos habría despreciado
llamándonos pulgas o pulgosos.
Para
resumir: si Hernández hubiera querido que me sienta insultado me
debiera haber llamado haragán, parásito, corrupto, parte de la casta,
aristócrata o algún epíteto de ese tipo y no pulga o pulgoso.
PN:
En realidad le dijo pulga o pulgoso por el logo de Pequeñas
Noticias donde se ve un bichito que no supo qué es.
CGdeR:
Hace 25 años que a Pequeñas Noticias la representa una
abejita. A ver chicos, si tiene alitas de abejita, antenitas de
abejita, es amarilla y negra como las abejitas, lo más probable es
que sea una abejita. Supongo que Hernández fue al jardín de
infantes donde se enseñan los animalitos. Él es un importante
funcionario y un eximio letrado, entiendo que hace sólo dos años
que está en propiedad horizontal pero... en serio, ¿Uds. piensan
que el doctor no estudia a fondo cada tema sobre el que piensa
hablar? Pensar que no sabía que es una abejita sería subestimarlo.
Otras
pulgas como nosotros, los lectores de Pequeñas Noticias,
bautizaron a nuestra mascota hace muchos año como Dulcinea.
Sentimos que nos representa porque la abeja es un bichito muy
simpático que vive en consorcios. Para nosotros y nuestros lectores
representa todo lo positivo de vivir en una comunidad.
Tal
vez por eso le molestó. A los poderosos le molestan cuando los pulgosos, perdón quise decir ‘vecinos’,
se organizan
en comunidades. Y sobre todo les molesta cuando les exigen a sus
importantes y doctos funcionarios que cumplan con sus obligaciones,
a esos los llaman tóxicos mientras se acomodan sus pelucas.
PN:
Hernández volvió a obligar a la Sra. Ana María Huertas,
presidenta de ACoPH, a desmentir sus dichos, ¿qué opina?
CGdR:
Es más de lo mismo. Es un hombre grande y fuerte, un alto
funcionario de la provincia con un excelente sueldo pagado por los
contribuyentes bonaerenses destratando a una señora mayor digna del
mayor de los respetos que con su jubilación -y las de otras
señoras que la acompañan en la comisión directiva- realizan hace
muchos años un arduo trabajo para ayudar a los consorcistas. A esos
mismos consorcistas que ahora ciertos personajes llaman
"denunciadores seriales", "tóxicos" o
"quejosos".
PN:
En un pasaje de su monólogo Marcos Hernández dijo
textualmente refiriéndose a Ud. que "el único que está
llegando [a la gente] era un medio de Capital que le contaba a la
gente cuánta nafta usaba el helicóptero de un gremialista. A la
gente no le interesa cuánta nafta usa el helicóptero de un
gremialista...". La pregunta es: ¿por qué Pequeñas
Noticias hace notas que a la gente no le interesan?
CGdR:
En primer lugar, te voy a contestar por qué a la gente le interesa -o
le debería interesar- cuánta plata gasta un gremialista en su
helicóptero y después te voy a contestar por qué para Hernández el
tema es irrelevante.
El
helicóptero del gremialista y su mantenimiento lo pagan los
consorcistas y los encargados de edificios a través de sus cuotas
sindicales, sus aportes y contribuciones mensuales. Cuando pagan la
contribución solidaria, cuando contratan los seguros obligatorios
establecidos en las convenciones colectivas de trabajo y cuando
pagan el Curso del SERACARH. El helicóptero sale lisa y llanamente
de esa parte de las expensas mensuales que no va al bolsillo de
encargado.
O
sea que ese helicóptero lo paga el pueblo "pulguiento"
con su sueldo, con sus jubilaciones y -aquellos que no tienen
trabajo- con la plata que sacan de alguna changa. Esas pulgas que
conformamos el pueblo anónimo.
No
es ningún secreto que Marcos Hernández comparte espacio político
con Víctor Santa María, lo que no me parece mal pero...
señala a las claras que no es imparcial a la hora de opinar o
ponderar una nota periodística como importante o no importante. Y
da a entender que probablemente en otras cosas tampoco lo sea...
Respondiendo
a tu segunda pregunta, ambos –Hernández y Santa María- salvando
las distancias ocupan un cargo en la función pública, uno en la
provincia y el otro en un sindicato. Da la sensación de que Marcos
todavía no entiende del todo que cuando se cumple con una función
pública se está expuesto a una observación mucho más rigurosa y
detallada de todos sus actos, y que es un deber y un derecho rendir
cuenta a la sociedad de sus resultados.
Y
está bien que así sea porque su nivel de vida y sueldo nace del
esfuerzo de todas las pulgas y pulgosos anónimos que con nuestro
trabajo e impuestos hacemos grande a un país.
Los
tengo que dejar porque debo seguir trabajando pero quiero concluir
recordando a todas las pulgas y pulgosos que este año nos toca
volver a votar.